En la comisión de Medio Ambiente de la Cámara baja, pidieron leyes más robustas, endurecer sanciones, una fiscalización eficaz y una nueva mirada enfocada en la prevención de catástrofes.
Dirigentes de la Conapach expusieron este lunes en la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara de Diputados, respecto de los daños y el impacto ambiental que causan las salmoneras en fiordos y ríos de la región de Los Lagos; en referencia, al último evento de mortandad de salmones producto de Bloom de Algas o Floraciones algales ocurrida en el Fiordo Comau, fenómenos cada vez más frecuentes debido al cambio climático.
En este contexto, Gladys Alvarado, directora de la Federación de Pescadores Artesanales de Hualaihué y directora de la Conapach, señaló que son principalmente fiordos y ríos los afectados por la industria del salmón en la región, tanto por el escape masivo de los ejemplares, altamente depredadores de otras especies; como por el hundimiento de balsas jaulas, cuyos desechos estructurales y orgánicos, no son retirados del fondo marino por parte de las empresas, obstruyendo y dejando inutilizados caladeros de la pesca artesanal.
“Respecto a las floraciones algales y la mortandad de salmones, la comuna se está viendo cada vez más afectada. El Fiordo Comau es un lugar con poca afluencia de corrientes, que sumado a la ausencia de lluvias, terminó por provocar una catástrofe ambiental. Creo que el Estado debería tener especial cuidado, sobre todo porque son Áreas Protegidas”, expresó la dirigenta.
Y finalizó, “la industria salmonera (Blumar) hace un trabajo colaborativo con la pesca artesanal pero de igual forma el daño ya está hecho. Son variadas las actividades que se desarrollan en el mar como para seguir con leyes permisivas que sigan destruyendo el fondo marino, con el consiguiente daño ecológico”.
Por su parte, Zoila Bustamante, tesorera del Sindicato El Futuro de Estaquilla y vicepresidenta de la Conapach, se refirió al tiempo que la pesca artesanal viene trabajando para mejorar la legislación referida a la instalación de centros de engorda y cultivo de salmones en la región, señalando que el problema persiste desde el 2010 y que desde entonces sólo un 0,01% de los casos por irregularidades han sido vistos por la superintendencia.
Del mismo modo, Agustín Ruiz, secretario de la Federación de Pescadores Artesanales de Hualaihué y director de la Conapach, criticó la lentitud en la aplicación de los protocolos por parte de la Industria (Camanchaca), tanto para retirar la mortandad de peces en el fiordo Comau; como por la incapacidad de adoptar medidas que se anticipen a la ocurrencia de emergencias, sobre todo ahora, que las condiciones climáticas están cambiando cada vez más.
Embarcación a cargo del protocolo de retiro de salmones muertos (Foto: Alvaro Vidal)
“Creo que debemos afrontar este problema desde otra visión, desde la prevención, tomando decisiones más efectivas. Ahora la industria no puede decir que no hay tecnología para predecir el clima, por ejemplo. Por otro lado, el abandono de los desechos producto del hundimiento de balsas jaulas no debe convertirse en una situación habitual, se deben endurecer las sanciones o definitivamente suspender la operación de aquellas empresas que no cumplan la normativa”, enfatizó el dirigente.