En cada caleta de Chile, ayer 29 de junio y antes, durante todo el fin de semana, se celebró la tradicional Fiesta de San Pedro, una fecha muy querida para la pesca artesanal y que llena de orgullo a hombres y mujeres de mar.
Les presentamos una pequeña muestra de lo que sucedió ayer y una pequeña reflexión de sus protagonistas:
CALETAS ANAHUAC, PUNTILLA Y CAPILLA DE TENGLO, REGIÓN DE LOS LAGOS:
Juan García, presidente del Sindicato de pescadores artesanales de Anahuac: “El año pasado no lo pudimos hacer pero este año organizamos una semana de actividades, que comenzó el viernes, con la entrega de alimentos del mar a poblaciones de Puerto Montt de más bajos recursos y organizaciones de adultos mayores y juntas de vecinos, para culminar hoy con la procesión de San Pedro, a la que se fueron acoplando embarcaciones de otras caletas como Capilla de Tenglo y Puntilla de Tenglo, reuniendo a más de 60 embarcaciones.
Estamos satisfechos, muy contentos y con hartas esperanzas de que todo este esfuerzo por realizar esta fiesta sirva para que se acabe esta pandemia y podamos empezar a realizar nuestras actividades con normalidad en nuestras caletas.
Aunque este año lo hemos pasado mal por la poca ayuda que hemos recibido, esta actividad nos deja como reflexión el desafío de mantener viva una tradición que es ancestral, para que no se pierda, porque nos enorgullece y nos mantiene vivos como pescadores artesanales.
Nos motiva a seguir trabajando también por la “Ley Supersol” ya que especialmente este día recordamos a nuestros compañeros fallecidos por accidentes en mar entre embarcaciones artesanales y de mayor envergadura, por eso también nos encomendamos a San Pedro para sacar ese proyecto adelante y haya una regulación del tema.
Para terminar, solo decirle a las autoridades que este es un sector productivo importante, que no tiene que ser solo atractivo para las campañas políticas y debe ser cuidado muy sigilosamente por todas las autoridades, por medio de medidas reales, de políticas públicas eficientes que ayuden a su reactivación económica y al bienestar de nuestros pescadores artesanales”.
Segundo Almonacid, presidente del Sindicato Capilla de Tenglo y director de la Conapach: “Muy contentos porque a pesar que no fue fácil conseguir los permisos pudimos celebrar este año en la fecha que corresponde, el 29 de junio, día de San Pedro y porque resultó una ceremonia muy bonita y ordenada, tradición que tenemos cuidar por siempre.
No podemos decaer porque la pesca artesanal está más presente que nunca y aunque está sufriendo porque el gobierno lo ha apoyado poco y nada, tenemos la responsabilidad de levantar la voz para que llegue ayuda directa al sector.
Además, es una fecha donde recordamos a nuestros fallecidos por accidentes en el mar, por lo que es necesario enviar un mensaje a senadores y diputados sobre la tramitación de la “Ley Supersol”, a no darse tantas vueltas y sacarla lo antes posible para la protección de los pescadores artesanales.
SAN JUAN DE LA COSTA, REGIÓN DE LOS LAGOS:
Luis Adué, presidente del Consejo de pescadores artesanales del litoral de Osorno y director de la Conapach: “Para nosotros, la Fiesta de San Pedro no ha sido distintos de otros años excepto por que este no vinieron niños ni adultos mayores, solía ser una celebración familiar, donde se unían todas las caletas adyacentes. Este año sumamos la inauguración de una embarcación de alerce y las coronas de flores fueron realizadas por nosotros mismos.
Es un buen momento también para pedirles a las autoridades que cumplan las promesas que realizan a la pesca artesanal e implementen el INDESPA como corresponde, ya que aún está pendiente la elección de los 7 representantes de la pesca artesanal, para que de una buena vez los funcionarios no sigan tomando las decisiones dentro de cuatro paredes.
CALDERA, REGIÓN DE ATACAMA:
Miguel Ávalos, presidente de la Corporación de pescadores artesanales de Caldera y secretario de la Conapach: “Ha sido sumamente complejo realizar esta actividad en pandemia, más cuando se trató este año de quitarnos esta fecha tan importante para la pesca artesanal, gracias a Dios en el Congreso encontró apoyo transversal la idea de respetar esta conmemoración religiosa, parte de la fe cristiana.
En esta oportunidad, hemos querido pedir no solo por la pesca artesanal sino por toda la humanidad, para que acabe esta pandemia y podamos hacer esta ceremonia el próximo año como corresponde.
Por otro lado, decir que la crisis económica que afecta al sector pesquero, nos obliga a estar pendientes de la gente de mar y sus necesidades, ya que es un sector productivo importante, fuente de alimentación para la población, por lo que pedimos a todos a que nos cuidemos unos con otros y nos apoyen tanto como pescadores como ciudadanos mediante una colaboración colectiva y comunitaria”.